La selección española ha empezado la defensa de su corona continental dando un golpe de la mesa ante Montenegro (99-60), rival que anticipaba un peligroso debut en el Eurobasket, pero que sucumbió desde el pitido inicial.
Avisada por los tropiezos en la jornada inaugural de otras aspirantes como Lituania o Francia, la selección española salió muy concentrada al Polyvalent Hall de Cluj-Napoca y completó una faena redonda en defensa y en ataque. Este sábado, buscará su segunda victoria ante la República Checa (16:45 horas).