Buenísima mañana la que se presentaba en el Manzanares en el que se enfrentaban el Atlético de Madrid de Simeone, que no había conseguido ni una sola victoria en cinco partidos, frente al Granada de Abel Resino, cuyas cuatro derrotas en los últimos cinco partidos hacían de hoy, una cita vital para no peligrar aún más la permanencia.
La primera parte comenzó sin un dominador claro. El Atlético de Madrid no conseguía dar continuidad a sus propósitos por culpa de un Granada que se mantenía muy concentrado y contundente en sus ideas. Pero, tras una presunta mano que fue pitada a favor del Atleti, éste, pudo adelantarse en el marcador tras un centro al segundo palo de Gabi, que Koke ponía de cabeza y Miranda, con un espléndido gesto técnico, remataba a gol. Con el marcador para los locales, se irían los jugadores a los vestuarios.
El segundo periodo vino a ser la continuidad de lo visto en el primero. El Granada se acercaba tímidamente a la portería de Courtois y el Atlético hacía lo propio en la de Julio César. En el tramo final del partido, Mateu Lahoz expulsó a Henrique tras una falta clarísima por roja directa, estrictamente valorada. Lo que conllevó a que, tras una increíble recuperación y jugada personal de Juanfran que asistiría a Falcao, el Atleti metiera el segundo tanto, haciendo inevitable el empate para los visitantes.
A fin de cuentas, al Granada le faltó potencia en ataque y se vio a un Atleti que cuando le falta el juego, le sobra el gol.
El protagonista: Mateu Lahoz. No vio una presunta mano de Miranda en el área y fue muy estricto en la expulsión de Henrique en los últimos minutos, lo que condicionaría las posibilidades del Granada de obtener el empate. Suspenso merecido para el colegiado valenciano.
Si (
No(
