El Valencia, con una derrota ante el Olympique de Lyon (0-2), se despide de la peor forma posible de la Liga de Campeones y jugará únicamente la Liga Europa junto al Sevilla, tras un partido en el que nunca encontró la forma de hacer daño a su rival.
Cuando en el primer periodo el equipo de Gary Neville quiso controlar el partido, no logró hacerlo y recibió el primer gol y cuando acorraló al rival en su área en la segunda mitad, un contragolpe del equipo francés cerró un partido en el que el Valencia necesitaba ganar y esperar que no lo hiciera el Gante para seguir en el primer torneo continental, algo que ni siquiera pasó.
Todo quedó definido tras ese tanto. Solo restaba esperar el final del choque y el trabajo para mejorar al equipo de cara tanto a la Liga como a la Liga Europa, tras un partido en el que el Olympique, colista y que nada se jugaba, logró su única victoria en esta fase de la competición tras completar un buen encuentro en Mestalla.