El Real Madrid, salvo catástrofe, estará en las semifinales de la Champions League. El equipo de la capital de España no tuvo rival al frente y logró una victoria importante en sus aspiraciones europeas. Cristiano, Benzema e Higuaín se erigieron como los protagonistas del partido por sus respectivos goles.
El Galatasaray solo dispuso de un par de lanzamientos lejanos para incomodar la portería local. El Real Madrid fue dueño y señor del partido desde el principio hasta el final. Los primeros instantes de partido dilucidaron que el ritmo del encuentro iba a estar marcado por el Madrid. Alonso volvió a estar inconmensurable en el juego madridista comenzando en el minuto 3 con un cambio de juego a Di María que centra a Benzema y estuvo a punto de marcar. Poco después, el tolosarra inició la jugada del primer gol merengue.
El primero en abrir la lata como no, fue Cristiano. En el minuto 8, Alonso levantó la cabeza y trazó un pase magnífico a Benzema, que desvió a Özil y el alemán abrió a Cristiano que con un toque sutil batió a Muslera.
El Galatasaray no reaccionó, únicamente contaba con sendos disparos a portería desde una posición bastante lejana. El conjunto turco empezó a arriesgar subiendo con la mayoría de los jugadores hacia campo contrario, un ejemplo de no jugarle así al Madrid. Con pocos efectivos en la zona defensiva, el Galatasaray pudo pagar cara su osadía pero el Madrid no materializó algunas contras.
No obstante, el peligro turco era Drogba que en la única vez que fue capaz de burlar a Varane (una vez más inconmensurable), creó el pánico en una gran maniobra al quedarse prácticamente solo ante Diego López. El costamarfileño envió el balón demasiado alto. En el minuto 29, el Madrid golpeó de nuevo. Essien apareció por la banda derecha y colgó el balón al área, un centro que cazó Benzema y ejecutó a la perfección. El francés rompió su sequía de goles en un instante y estableció el 2-0. El Galatasaray buscó la oportunidad de meterse en el partido y Eboué estuvo a punto de conseguir tal objetivo pero Diego Lopéz desvió el disparo.
En la segunda mitad el entrenador turco, retiró a Sneijder y trató de equilibrar su once, con tres centrales y dos carrileros. El Real Madrid seguía siendo dueño y señor del partido y tan solo con incrementar el ritmo de partido, podía sentenciarlo. Higuaín se encargó de sentenciar prácticamente la eliminatoria después de cabecear la falta que sacó Xabi Alonso. El centrocampista volvió a deleitar al público con un balón que a los especialistas a balón parado les gusta. El jugador argentino celebró el gol con rabia después de que en las últimas semanas se les criticase a él y a Benzema por su sequía goleadora.
El Galatasaray pudo maquillar el resultado si el árbitro del partido hubiera señalado penalti de Sergio Ramos tras pisotón del sevillano a Burak Yilmaz. El colegiado amonestó al delantero turco por entender que se tiró a la piscina y esa amarilla provoca que Yilmaz no juegue la vuelta en Turquía. Al delantero le acompañaron también Ramos y Alonso que forzaron la amarilla y cumplir ciclo de sanción para llegar limpios a semis.
La eliminatoria en su partido de ida concluyó 3-0. Una renta que deja prácticamente al Real Madrid pie y medio en las semifinales pero en el infierno turco todo es posible.
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