Partido bastante horrible el que se ha vivido en Zorrilla. Parecía que no se jugaban nada y más el Dépor, que necesitaba los tres puntos como agua de mayo. Comenzaron dominando los visitantes, pero se desinflaron rápidamente hasta que el partido llegó a un ciclo de imprecisiones y de posesiones sin peligro. Jaime y Aranzubía estuvieron de adorno en toda la primera parte y también la segunda.
En los primeros 45 minutos solo destacó las subidas de Rukavina y una ocasión de Óscar, cuya volea se fue rozando el larguero. Fue el único “Uy” que se cantó en el primer tramo del partido. Tras los quince minutos de descanso, el Valladolid se adelantó gracias a un golazo de Javi Guerra de tacón, que se aprovechó de la empanada defensiva gallega para poner la belleza al partido. El gol parecía abrir un poco el partido, pero los porteros siguieron sin participar al 100%. Anularon correctamente un gol al Deportivo de Oliveira y ahí se quedó la respuesta de los de Fernando Vázquez, que deberán mejorar su versión en casa si quieren seguir compitiendo con los más grandes de España otro año.
La otra cara de la moneda la protagoniza el Valladolid. Tras una gran temporada, con un buen juego y comandados por un excelente entrenador como Djukic, los blanquivioletas consiguen la permanencia, extendiendo la alegría por toda Pucela.
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