La posible carrera política de Assange se tuerce

La posible carrera política de Assange se tuerce

jueves 16 de octubre de 2014, 19:11h

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La candidatura de Julian Assange al Senado de Australia, su país natural, ha logrado ponerlo de actualidad y ser la comidilla de estos comicios. El problema es que la candidatura empieza a hacer aguas.

La posible carrera política de Assange se tuerce

El partido Wikileaks de Assange prometió a los australianos “democracia, transparencia y responsabilidad”, pero a las puertas de las elecciones generales del 7 de septiembre el apoyo de la organización a partidos de extrema derecha revelaba la falta de transparencia y de democracia interna.

“Assange y su padre fundaron un partido con una estructura razonablemente democrática y sin esta democracia interna nunca me habría unido al Consejo Nacional [la dirección], pero todo se ha reducido a una farsa y debo abandonarlo”, afirmó el exdirigente del partido y cofundador de Wikileaks Daniel Mathews.

A este abandono le sucede el de la académica Leslie Cannold que iba tras Assange en la lista y ocuparía su escaño si él no pudiera tomar posesión.

Mathews y otros cuatro miembros de los 11 que integraban la dirección abandonaron la formación en los últimos días con acusaciones hacia Assange y a su padre, John Shipton, de otorgar al primero derecho a veto sobre las decisiones del grupo.

En abril, los sondeos indicaban que un 26% de australianos votaría a Wikileaks, pero ahora los analistas estiman que obtendrán la décima parte, muy lejos del 17% necesario para entrar en el Senado.

Sin embargo, el complejo sistema para distribuir los escaños en la Cámara alta podría jugar a favor de Assange. Y es que los australianos eligen a sus senadores en listas abiertas e indican preferencias. Y es habitual que los partidos difundan una lista de preferencias para sus simpatizantes.

El escándalo estalló cuando Wikileaks, en lugar de priorizar aliados naturales como el partido de Los Verdes o el partido Pirata, recomendaba una candidatura de extrema derecha y minoritaria denominada Cazadores y Pescadores que apuesta por liberalizar las leyes de protección del medio ambiente y como segundo favorito, Australia First, fundado por un neonazi y contrario al multiculturalismo y la inmigración.

Wikileaks atribuye sin embarga esta polémica elección a un error burocrático y han cerrado filas en torno a su líder, como en toda buena formación política.

Pero eso no ha frenado el reguero de declaraciones amargas de dirigentes que han abandonado el proyecto, a las que se le han unido sus decepcionados simpatizantes en las redes sociales. “Un voto para el Partido Wikileaks es ahora un voto para los micropartidos de derecha y en contra de Los Verdes”, lamentaba una seguidora del partido en Twitter.

Assange, lleva más de un año varado en la Embajada de Ecuador en Londres para evitar ser interrogado sobre acusaciones sexuales, y con el partido Wikileaks confiaba en que convertirse en senador dé un vuelco a su situación actual.

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