Los partidos del Mundial podrán detenerse las veces que sea necesario para que se hidraten los jugadores. Así lo ha explicado la FIFA tras la reunión del comité ejecutivo en Salvador de Bahía (Brasil).
El árbitro y un responsable médico decidirán, si el calor puede suponer un impedimento a los jugadores, cuántas pausas serán necesarias para que los futbolistas beban agua.
El máximo responsable del fútbol mundial espera que todos los estadios estén listos para su uso a mediados de abril, pese a los retrasos en la construcción de los recintos, previstos inicialmente para final de año.