Comenzaba el duelo entre la Real Sociedad y el Sevilla, y ambos coincidían en una cosa, querían los tres puntos. Los locales buscaban una victoria que diera tranquilidad a sus aficionados. Los de Nervión tenían la necesidad de ganar en el estreno de Míchel como técnico sevillista. Todo esto se vio reflejado en la primera mitad, que no dominó ninguno de los dos equipos. Como cual combate de boxeo ambos estudiaban a su rival y golpeaban equitativamente.
Empujaban Agirretxe y Vela por los locales con un gran Rubén Pardo curtiéndolos de balones, mientras que las ocasiones visitantes llegaban en las galopadas de Navas por la derecha y con un insistente Manu por la izquierda. Reyes quería pero no podía y Negredo no está en forma, echa de menos el Sevilla a su 9. El partido cogía ritmo y en el 40 de la primera mitad llegó la mejor ocasión hasta el momento, la puso de lujo Carlos Martínez para Vela que la tenía que empujar pero su disparo lo despejó Palop que volvía a la titularidad.
En la segunda mitad y cuando menos lo buscaba el conjunto blanquiazul llegó el gol de Carlos Vela en el minuto 64, el mexicano está en un estado de forma espléndido. Tan solo cuatro minutos después, Vela dejaba un balón de cara a Rubén Pardo que fusilaba la meta de Palop desde la frontal. El gol del canterano culminaba una actuación descomunal.
La Real rompió los tópicos y ganó en el debut de Míchel, muchas eran las miradas puestas en el técnico madrileño y una vez más decepcionó. No se vio mejoría alguna en el cuadro sevillano y una vez más volvió a perder, tan solo ha ganado una vez a domicilio en toda la temporada y ha anotado seis goles, un bagaje muy pobre para uno de los gallitos de la categoría. En cambio, el conjuto de Donostia demostraba una vez más que a base de empujones, corazón y la técnica de los de arriba puede ganar fácilmente.
El protagonista: Carlos Vela. el mexicano abrió la lata y dio la asistencia en el segundo gol de su equipo.
Si (
No(
