“Este mediodía he hecho una sesión cortita. Mañana será más larga e intensa. No quiero perder tono muscular y así veo también el grado de molestias en el apoyo”, comenta el ciclista del Movistar Team, que se muestra risueño y optimista.
Rojas es consciente del grado de dificultad que tiene poder recuperar tanto el punto de competición como la fuerza en el hombro, muy importante en una carrera como la prueba en línea de los Juegos Olímpicos, donde hace suceden los ataques y aceleraciones, y eso obliga a un gran esfuerzo de tracción con los brazos y hombros. “Vamos a hacer lo posible, pero si veo que no estoy para rendir al cien por cien, seré el primero en decírselo al seleccionador”, afirma el ciclista de Cieza.
José Joaquín Rojas fue intervenido quirúrgicamente a últimas horas de la noche del miércoles de la triple fractura de clavícula que se produjo el pasado martes en la caída sufrida en los últimos kilómetros de la tercera etapa del Tour de Francia.
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