16ª Etapa: Pau - Bagnères-de-Luchon

El dopaje no deja tregua

El hermano menor de los Schleck, Frank, fue expulsado por su propio equipo en la jornada de ayer, el Radio Shack, después de su positivo por un diurético (el Xipamide) durante la 13ª etapa del Tour de Francia. El corredor luxemburgués, afirmo que no había tomado esa sustancia y que iba a presentar una denuncia por envenenamiento una vez que se conozca su positivo. Una vez más el Tour queda manchado por el dopaje y por los corredores implicados, no sabe aún cuando se acabará esta situación.

La jornada se inició en torno a las 11 de la mañana con la salida neutralizada y los intentos de los corredores por coger la fuga. Después de numerosos ataques se compuso una fuga de 38 corredores entre ellos estaban Kiryienka, Rui Costa y Karpets (Movistar), Voeckler (Europcar) Kessiakoff,  (Astana), Egoi Martínez, Gorka Izagirre y Azanza (Euskaltel) y Daniel Martin (Garmin). La fuga se consolidó en la subida al Aubisque con una diferencia cercana a los 4 minutos.

En el pelotón el Sky relajó al grupo y las diferencias aumentaron mucho más con el inicio del Tourmalet con rampas muy duras en los últimos km superiores al 11%. El ataque de varios corredores de la fuga hizo que las diferencias aumentasen con respecto al pelotón que estaban ya por encima de los 10 minutos.

El movimiento de Voeckler más allá de la mitad de la subida al Tourmalet fracturó la fuga y salieron a su rueda Daniel Martin y Feillu. Daniel Martin no aguantó el ritmo del francés y quedó descolgado. Los dos franceses, Voeckler y Feillu, se marcharon en solitario y las ventajas con los perseguidores llegaron al minuto.

En la bajada del Tourmalet los dos escapados consiguieron mantener las distancias con respecto a los perseguidores o incluso aumentarlas al minuto y medio. Por detrás estaba el pelotón a 10 minutos.

Ya en la subida al Col d'Aspin, de 1ª Categoría de 12,4 kilómetros de subida, la cabeza de carrera siguió aumentando las distancias y al grupo perseguidor se le unieron varios corredores que estaba compuesta por Kiryenka (Movistar), Chris Sorensen (Saxo Bank), Alexandre Vinokourov (Astana), Daniel Martin (Garmin), Voigt (Radio Shack), Ten Dam (Rabobank) y George Hincapie (BMC).

De nuevo aparecieron los ataques entre los perseguidores y Voigt, Sorensen y Vinoukurov se escaparon en busca de los dos corredores franceses. Mientras en el pelotón, el Liquigas tomó los mandos del pelotón e incrementó el ritmo de la mano de Basso.  El ritmo del italiano dejó sorprendentemente a Cadel Evans que se quedó descolgado del pelotón y perdiendo contacto.

Las diferencias con Evans en la subida con respecto al grupo de Wiggins estaban en 45 segundos. Un tiempo que podía ser recuperable pero que el Liquigas se encargó de que no pudiera entrar en el pelotón. Finalmente el trabajo del BMC valió para que Evans volviera a entrar en el pelotón poco antes del inicio del Peyresourde. Puerto de 1ª Categoría de 9´5 km de ascensión con rampas en torno al 9%.

La pájara de Evans, la oportunidad de Nibali y el control de Wiggins y Froome

Los corredores de cabeza aventajaban en 35 segundos al grupo perseguidor que se rompió después del ataque Sorensen (Saxo Bank).  Mostrando fuerza y coraje Voeckler intensificó el ritmo de la subida y dejó tocado a Feillu que además de perder contacto con Voeckler fue superado por Sorensen. Mientras en el pelotón Vanendert (Lotto-Belisol) se encargó de incrementar el ritmo en el pelotón y de nuevo Cadel Evans se quedó. Al australiano del BMC le entró una pájara que hizo que perdiera toda opción de ganar el Tour y de estar en el podio.

Basso colaboró también en la subida con un ritmo machacador a los corredores que se iban quedando ante el ritmo del italiano. Entre los españoles seguían Valverde y Cobo (Movistar) y Haimar Zubeldia (Radio Shack). Las diferencias con Evans seguían aumentando y estaban por encima del minuto. La parsimonia del pelotón acabó con el ataque de Nibali a falta de 3 km para coronar, contando con una ventaja importante sobre Wiggins pero que inmediatamente Froome la redujo. El grupo de Froome, Wiggins y Nibali iba por delante del grupo de Van den Broeck, Valverde y Haimar a 15 segundos.  Antes de coronar Nibali lo volvió a intentar pero de nuevo sin éxito. Las diferencias de los tres corredores en la cima con el grupo perseguidor estaban en torno a los 45 segundos y más de 4 minutos con Cadel Evans.

Voeckler se tomó la bajada arriesgando aunque sabía que iba a ganar ya que las diferencias con Sorensen estaban en 1:35. El francés encarriló el último km con tranquilidad celebrando su segunda victoria en este Tour y la tercera victoria para su equipo, el Europcar, además de colocarse como líder del maillot de la montaña. Sorensen quedó segundo en la etapa y el español, Izaguirre acabó tercero. 

El grupo del líder llegó a 7:08 del vencendor y picó 58 segundos al grupo de Haimar Zubeldia. La pájara de Evans llegó hasta una pérdida de 4:47 con Wiggins y 3:49 con el español del Radio Shack.

La general queda de la siguiente manera:

1. B Wiggins (Sky) 64 h 41´ 16´´

2. C. Froome (Sky) a 2´ 05´´

3. V. Nibali (Liquigas) a 2´ 23´´

4. J. Van den Broeck (Lotto Belisol)  a 5´ 46´´

5. H. Zubeldia (Radio Shack) a 7´ 13´´

6. Van Garderen (BMC) a 7´ 55´´

7. C. Evans (BMC)  a 8´ 06´´

8. Janez Brajkovic (Astana) a 9´ 09´´

9. P. Rolland (Europcar) a 10´ 10´´

10. T. Pinot (FDJ) a 11´ 43´

La etapa de mañana constará de 143´5 km entre Bagnères-de-Luchon – Peyragudes con la ascensión encadenada al Port de Báles (Categoría Especial), el Peyresourde y el Peyragudes, ambos de 1ª Categoría. Última jornada de dura montaña si Nibali quiere  ponerle las cosas difíciles al Sky, pero viendo como están las cosas, Wiggins mantendrá el liderato hasta París.