Kimi Antonelli, el novato de Mercedes, reflexiona sobre su difícil fin de semana en Mónaco tras un desafortunado desempeño en la clasificación que lo dejó en P15. A pesar de los contratiempos, Antonelli se muestra optimista y enfocado en aprender de la experiencia. La estrategia del equipo no logró dar sus frutos, pero el joven piloto destaca la importancia de las lecciones aprendidas para futuras carreras. Con el objetivo de mejorar y recuperar puntos, Antonelli está decidido a no repetir errores pasados.
Kimi Antonelli, el novato de Mercedes, dejó Mónaco con la determinación de recuperarse tras un fin de semana de carreras frustrante en su primera temporada. Las esperanzas del equipo se desvanecieron rápidamente, ya que el piloto italiano no logró obtener puntos.
La competitividad de Antonelli se vio truncada en la sesión de clasificación cuando chocó contra las barreras mientras intentaba mejorar su tiempo por vuelta. Como resultado, finalizó en P15 en la parrilla de salida.
Su compañero de equipo, George Russell, también enfrentó problemas técnicos y ocupó el P14 justo delante de él. Ante esta situación, Mercedes optó por una estrategia alternativa para cumplir con la nueva regla de dos paradas en boxes introducida en Mónaco.
El equipo decidió extender su tiempo en pista antes de realizar cualquier parada, esperando que apareciera un Safety Car o una bandera roja que les permitiera realizar una detención gratuita. Sin embargo, este escenario no se materializó y Antonelli terminó siendo uno de los últimos pilotos en cambiar neumáticos, cayendo al último lugar en la carrera.
“Fue bastante relajante, para ser honesto”, comentó el joven piloto de 18 años con optimismo. “Fue una carrera muy tranquila; solo hubo acción en la vuelta 1. Estábamos tratando de ir a lo largo desde el principio”.
A pesar del resultado decepcionante, Antonelli expresó que había hecho todo lo posible para ayudar a su equipo: “Estaba haciendo lo que el equipo me pidió y estábamos intentando llevar al menos uno de los coches a los puntos. Desafortunadamente, no funcionó, pero no podía haber hecho más”.
En sus últimas cinco vueltas, pudo acelerar y disfrutar del manejo del coche: “Era algo esperado cuando comienzas tan atrás en Mónaco. Sabes que será difícil avanzar, pero también creo que no debería haber estado en esa posición. El error del día anterior fue costoso y me aseguraré de no cometerlo nuevamente”.
A pesar de no haber logrado puntuar desde el Gran Premio de Miami, Antonelli se mostró dispuesto a aprender y mejorar. En una táctica similar a la utilizada por Racing Bulls y Williams, ayudó a mantener a raya a los pilotos detrás para permitir que Russell realizara dos paradas sin perder demasiado tiempo, culminando la carrera en P11.
Aunque ninguno logró recuperar posiciones suficientes para sumar puntos, Antonelli estaba decidido a enfocarse en las lecciones aprendidas durante la carrera: “Este fue un fin de semana difícil. Creo que había mucho que aprender, especialmente sobre las decisiones relacionadas con la configuración del coche”.
El piloto italiano concluyó diciendo: “Durante el fin de semana, fuimos en una dirección y luego comenzamos a regresar a donde empezamos. Así que creo que he aprendido cosas valiosas para el futuro. También fue bueno manejar la frustración durante la carrera”.
Kimi Antonelli tuvo un fin de semana frustrante en Mónaco, donde su carrera se vio interrumpida en la clasificación al chocar contra la pared, lo que lo dejó en P15 en la parrilla de salida.
Mercedes adoptó una estrategia alternativa debido a problemas técnicos con su compañero de equipo George Russell. Decidieron no entrar a pits hasta más tarde en la carrera, esperando un Safety Car o una bandera roja que les permitiera hacer una parada gratuita.
A pesar de los desafíos, Antonelli intentó mantenerse positivo y mencionó que había aprendido mucho durante el fin de semana, especialmente sobre las decisiones de configuración y cómo manejar la frustración durante la carrera.
Antonelli no ha anotado puntos desde el Gran Premio de Miami.
Antonelli destacó que este fin de semana fue difícil pero lleno de aprendizajes, especialmente sobre cómo dar retroalimentación al equipo y gestionar situaciones complicadas en pista.