La misiva está firmada por catedráticos, doctores y consultores en biología, botánica, ciencias físicas, biodiversidad y geología que avalan un estudio del doctor Antonio Guillén, quien concluye que "los vertidos fecales y residuales contaminan y ponen en serio peligro la conservación del ecosistema del Lago de Sanabria".
Por ello solicitan la subsanación y paralización urgente de los vertidos antes de que se pierda un recurso natural de gran valor ecológico.