La preparación se ha llevado a cabo en la zona de Merzouga, con resultados satisfactorios como él mismo ha explicado a su regreso a España: “Han sido unos test positivos. El objetivo era el de seguir acumulando kilómetros con la moto y tratar que el conjunto piloto-moto vaya compenetrándose al máximo. Estos kilómetros son muy importantes para nosotros. En nuestra preparación para el Dakar, siempre hemos realizado este entrenamiento y siempre ha sido bueno. Aquí las condiciones ya empiezan a ser complicadas, con frío, y no es la mejor situación para ir en moto. Además, en Marruecos te aíslas un poco y siempre va bien para centrarse en el trabajo”.
Las pruebas de preparación con la KMT parecen haber ido bien, aunque seguirá con la puesta a punto física: “Ahora seguimos con la preparación habitual, con trabajo en el gimnasio, bicicleta y si el tiempo acompaña, también con la moto. Además de algún trabajo específico de altura, para habituarnos a algunas etapas que encontraremos en el Dakar.”