Dos días después de la celebración del Gran Premio de Gran Bretaña, Alonso volvía a salir al asfalto del trazado británico y dejó buenas sensaciones tras dominar la tabla de tiempos gracias a su sesión matinal, en seco.
Así, el asturiano, decimotercero el domingo en la carrera mundialista, rodó antes del parón para comer un total de 55 vueltas, llegando a marcar, con los superblandos de Pirelli, un registro de 1:31.290.