Además, el Gran Premio de Indianápolis registro un pleno de podios españoles tanto en Moto3 como en MotoGP, aunque no en Moto2 dónde sólo Rabat pudo pisar el lugar más alto del cajón.
Márquez aumenta así su ventaja en la clasificación provisional del mundial con la que fue la tercera victoria consecutiva y la cuarta del año y ello después de dar muestras de haber planificado a la perfección la carrera; No fue hasta el noveno giro cuando Márquez adelantó a Pedrosa y se fue a por Lorenzo, tras el que aguantó hasta la decimotercera vuelta, en la que se arrimó a él al final de la recta de meta para abrirse en la primera curva y ganarle la posición a su rival en la siguiente.
La carrera estaba ya sentenciada pues aunque Lorenzo y Pedrosa aguantaron el tipo tras el debutante de la temporada, ninguno de los dos pudo contrarrestar la eficacia de pilotaje de su rival, que marcó el ritmo en las catorce vueltas que todavía quedaban para el final de la prueba. El interés de la carrera se trasladó a la pelea por la segunda plaza y ahí, tras el respiro que se dio Pedrosa tras Lorenzo, se acercó a él y a dos vueltas del final el piloto de Repsol superó al campeón del mundo para consolidarse en la segunda plaza.
Por su parte en Moto3, Alex Rins (Estrella Galicia 0'0 KTM) sumó su segunda victoria consecutiva y la tercera de la temporada, por delante de su compañero de equipo Alex Márquez y de Maverick Viñales (KTM), lo que le permite acercarse en la general provisional del mundial al maltrecho líder de la categoría, el español Luis Salom (KTM) quien sufriera una fuerte caída en la que se dañó el tobillo izquierdo y por ello pasó una muy mala noche y amaneció con una gran inflamación en el miembro lesionado, lo que le hizo rendir muy por debajo de sus posibilidades en los últimos libres y para la carrera tuvo que salir infiltrado para aguantar el dolor y también con tranquilidad para conseguir acabar quinto la carrera.
Rabat, la sorpresa
En Moto2, Esteve 'Tito' Rabat (Kalex) gestionó de manera brillante sus opciones a la victoria en una carrera que dominó casi en todo momento el japonés Takaaki Nakagami (Kalex), pero que acabó ganando el español con unas magistrales cinco últimas vueltas. Pol Espargaró (Kalex), cuarto al final, perdió una ocasión de oro para restar puntos a su rival por el título, el británico Scott Redding (Kalex), quien logró la tercera posición.
Rabat fue la sorpresa de la carrera ya que a cinco vueltas del final dejó en la estacada a Redding y Espargaró para lanzarse a por Nakagami, al que le restó más de siete décimas de segundo en una sola vuelta y un segundo en la siguiente, cuando le superó y se marchó en solitario camino de un contundente triunfo.
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