Partido plácido, mucho más de lo que se pensaba, el que vivieron los coruñeses en el Ciutat de Valencia. Los aficionados del club gallego no encuentran palabras para poder describir el milagro que están viviendo: cuatro victorias consecutivas, 12 puntos que tornan su tristeza en alegría.
El partido no pudo empezar mejor para los de Fernando Vázquez cuando Valerón daba ventaja a los suyos con un disparo de la alta realeza. Los blanquiazules mataron el partido ocho minutos después en una contra finalizada por Pizzi, que no sabe cómo su valor se revalorariza cada partido.
Siguió el Dépor con su ritmo frenético para abrir más distancia en el marcador. Esta vez fue Oliveira el que ajustó su chut al palo y superar por tercera vez en la tarde a Munúa. El Levante no consiguió reaccionar en la segunda parte, mientras que los coruñeses volvían a disfrutar del fútbol, de lo que más les gusta hacer.
Los gallegos pusieron el toque final con el tanto de Gama sobre la bocina, desatando la locura ante los miles de aficionados del Dépor desplazados a la capital del Turia, mientras que el equipo de JIM comienza a ver Europa como tema utópico.
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