Lejos queda el sueño español en el Campeonato de Europa cuando despertaban el recelo de sus contrincantes partido tras partido. La realidad es otra; España ha perdido ante Croacia por 31-27 y se queda sin podio.
Un fin de semana fatídico para el equipo español después que no ha sabido superar el trance tras perder contra Dinamarca por 25-24.
Con un comienzo que hacia presagiar una derrota sin precedentes, los croatas doblaban el marcador español a los 15 minutos. Sin embargo, Iker Romero salió dispuesto a cambiar el resultado con tres lanzamientos más que fulminantes.
Sierra parecía perdido entre la tensión del encuentro, lo que obligó al seleccionador a retirarle, apostando por un 5-1 con Roberto García al frente.
El cambio supuso el peligroso acercamiento de los españoles al marcador croata, a tan sólo tres tantos antes del descanso.
Los minutos fuera del juego permitieron a los croatas recuperar fuerzas, marcando a la vuelta tres goles en la red española.
Las oportunidades se iban disipando según trascurrían los últimos minutos del encuentro, con una tensión más que palpable y una derrota ya asumida desde el descanso por los españoles, que no pudieron más que aceptar un doloroso cuarto puesto fuera del podio.