El futbolista y su progenitor fueron juzgados en junio pasado por un delito de fraude a Hacienda de 4,1 millones en los ejercicios 2007, 2008 y 2009, al no haber pagado en España los impuestos por los ingresos percibidos por los derechos de imagen.
Normalmente, cuando no hay antecedentes penales y la condena es menor de dos años, los condenados no ingresan en prisión, pero el tribunal puede decidir lo contrario como ocurrió, por ejemplo, en el caso de Isabel Pantoja.
El futbolista ha sostenido que los asuntos relacionados con sus contratos y la gestión de sus ganancias y su patrimonio siempre corrió a cargo de su padre, pero este argumento no ha bastado para que el tribunal le absuelva.
En su sentencia, la sección octava de la Audiencia de Barcelona establece una multa de algo más de dos millones de euros para Leo Messi y otra de 1,6 millones de euros para su padre, por lo defraudado entre los años 2007 y 2009.
La Abogacía del Estado pedía 22 meses y 15 días de cárcel para ambos; la Fiscalía, un año y medio solo para el padre, a quien acusa de tener un papel clave en la creación de las sociedades que sirvieron para defraudar a Hacienda.
La sentencia establece que Leo Messi es condenado a siete meses de cárcel y una multa de 532.313,31 euros por el fraude fiscal al IRPF del ejercicio de 2007; otros siete meses de prisión y multa de 792.300,54 euros por el mismo delito en 2008, y otros siete meses y una multa de 768.387,70 euros por defraudar en el IRPF de 2009.
A su padre, el tribunal le impone también siete meses de prisión por cada uno de los tres delitos y multa de 532.313,31 por cada uno de ellos. La sentencia de la sección octava no es firme y puede ser recurrida ante el Tribunal Supremo. Padre e hijo abonaron cinco millones de euros y satisficieron la deuda que tenían con Hacienda.
Según la sentencia comunicada este miércoles, los contratos en los que se retribuye la representación del jugador Lionel Messi son suscritos por su Club y Sidefloor, dos empresas cuyos servicios profesionales son realizados por el padre del delantero: "Ello da idea de lo necesario de la colaboración de Jorge Horacio Messi en la explotación de los derechos de imagen del futbolista, sobre todo si tenemos en cuenta que en las fechas de 2007 y 2008 el jugador ya era mayor de edad y que él era quien había firmado sus contratos laborales con el FC Barcelona".
La Audiencia de Barcelona concluye que la intervención del padre del jugador fue esencial para cometer los delitos fiscales porque cooperó de forma "directa, decisiva y necesaria" en el planeamiento y el diseño de la estrategia para eludir impuestos.
En conclusión, "este Tribunal", indica la sentencia, "ha llegado a la plena convicción de que Jorge Horacio Messi colaboró con actos decisivos a la consecución por parte de su hijo del fraude a la Hacienda española".
De esta manera, "contribuyó con actos determinantes para la ejecución del plan que se fue forjando a lo largo del tiempo, al que aportó los conocimientos fiscales del bufete Juárez, además de su participación directa en muchos de los contratos cuyos ingresos no fueron declarados".
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