"Este último golpe que me han dado es terrible, porque me han lanzado a mí, a mi hijo y a mi familia al barro. Y además para mi mujer es terrible, porque ver a su marido y a su hijo encarcelados en una celda, echados al barro de la sociedad española y mundial del fútbol, no es fácil de llevar...", aseguró Villar en una entrevista con El Español.
"He vuelto a estar y a luchar con mis 67 años. Hago gimnasia todos los días, ando dos horas, me levanto a las seis y media de la mañana, estudio los documentos de la causa, pienso... Dentro de mis posibilidades, tengo alegría en una situación complicada y he aprendido que tengo que cuidarme, no preocuparme. Cuando tú cruzas la calle, tienes que tener cuidado, no preocuparte. Porque si te preocupas te pilla un coche", aseveró.