En un encuentro en el que el Blancos de Rueda sufrió, sobre todo en el último cuarto, debido al acierto del Fuenlabrada desde la línea de tres puntos, los de Roberto González supieron aguantar la presión y llevarse el partido, para así, poder conservar las esperanzas de mantenerse un año más en la Liga Endesa.
Durante el primer cuarto el marcador estuvo muy igualado, con ocasiones en las que los locales se posicionaban por arriba, gracias al juego en equipo, ante un Mad-Croc Fuenlabrada que sólo encontró el acierto de la mano de su mejor hombre, Penney, finalizando el período (17-15).
Los diez minutos siguientes fueron favorables para los madrileños que supieron aprovechar los fallos de los vallisoletanos para conseguir un parcial de (0-7). Aun así, los locales consiguieron hacerse con los rebotes para poder recortar distancias y marcharse al descanso por encima en el marcador (36-33).
Tras la reanudación, los de Roberto González salieron a por todas, con la esperanza de poder conseguir la victoria y enfrentarse a la salvación. La buena mentalidad con la que salió el equipo local aumentó la diferencia en el electrónico hasta alcanzar el (55-41) con el que finalizó el tercer cuarto y que obligó a Fisac y a los suyos a replantear su juego.
El último período estuvo protagonizado por la presión existente en ambos equipos. Los madrileños, con tres triples consecutivos, se acercaban en el marcador y los vallisoletanos no acertaban. Los fuenlabreños se pusieron a tres puntos (62-59), pero los locales, con ayuda de Diego García consiguieron sumar una victoria que les permite seguir soñando con la salvación.
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