El equipo español de natación sincronizada avisó que saldría a sorprender, y no defraudaron. Nuestras nadadoras aparecieron en la piscina como auténticas sirenas plateadas dispuestas a darlo todo en el agua. Tras un ejercicio de movimientos contantes, al compás de la música “el océano” de Salvador Niebla, el resultado fue impecable y sorprendente. Con una puntuación de 96.920 veían muy difícil o casi imposible alcanzar la medalla de plata, ya que supondría haber estado sobre los 97 puntos para alcanzar a las chinas. Aunque estas presentaron su ejercicio justo después, las expectativas se cumplieron: las nuestras aseguraron su bronce, las chinas su plata y el oro destinado casi de forma fija para las nadadoras rusas. Un error en el sistema informático de la puntuación mantuvo en tensión a todo el equipo español hasta recibir la puntuación final de la actuación.
Finalmente España finaliza las pruebas de natación sincronizada con bronce por equipos y plata del dúo compuesto por Ona Carbonell y Andrea Fuentes. Esta última, con la medalla de bronce por equipos, ha conseguido entrar en la élite de los atletas españoles que han podido conseguir cuatro medallas olímpicas.
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