En la 53ª edición de las 24 horas de Nürburgring, el equipo Mercedes-AMG enfrentó una serie de desafíos que les impidieron alcanzar un resultado favorable. A pesar de un inicio prometedor y una buena velocidad en carrera, problemas mecánicos llevaron a la retirada del coche #14 después de 41 vueltas. El coche #17, aunque logró recuperarse tras una penalización, también sufrió fallos técnicos que limitaron su rendimiento. Sin embargo, el equipo SR Motorsport by Schnitzelalm logró destacar al conseguir un tercer puesto en la clase SP9 PRO-AM. La carrera se vio interrumpida por un corte de energía inusual que afectó a los pits y las instalaciones de repostaje. Con 280,000 espectadores presentes, Mercedes-AMG ahora se prepara para la próxima competencia en las 24 horas de Spa.